La polémica en torno al Liruprint Fest 2025 no deja de crecer. Tras la salida de Lèpoka por falta de contrato y garantías, y la aclaración posterior que desmintió cualquier conflicto con Celtian, ahora es Ars Amandi quien anuncia su baja del cartel, alegando impagos y una gestión económica insostenible por parte de la organización.
UNA DEUDA PENDIENTE DESDE 2024
En un comunicado publicado por la propia banda, explican que a día de hoy todavía no han recibido el pago completo por su participación en la edición de 2024. A pesar de ello, decidieron confiar en la palabra del organizador, Jóse, quien les aseguró que el importe pendiente se abonaría pronto. Esa promesa fue lo que motivó su inclusión en el cartel de la edición de este año.
Sin embargo, y tras meses de intercambios de whatsapps, correos y llamadas, el pago sigue sin completarse. La banda admite que recibió un primer abono parcial, pero el resto continúa sin llegar, y a menos de dos meses del festival, no tienen garantías de que su trabajo vaya a ser remunerado.
“NO SE PUEDE MONTAR UN FESTIVAL SOBRE DEUDA”
Ars Amandi se muestra clara: “No se puede querer montar un festival sobre deuda, quizás esperando que con las ganancias de la próxima edición subsanes lo que debes de la anterior”. Recalcan que ellos sí pagaron a su equipo y asumieron todos los gastos derivados de su actuación, y que no están dispuestos a seguir adelante sin seguridad contractual ni económica.
Además, subrayan que no solo se está jugando con el trabajo de los músicos, sino también con la ilusión del público que asistió el año pasado y quería repetir.
LA ORGANIZACIÓN SIGUE EN SILENCIO
En contraste con el comunicado de Ars Amandi, la organización del Liruprint Fest ha publicado una versión mucho más escueta de la situación, admitiendo que la banda causa baja por impagos y la falta de devolución del contrato firmado, pero sin ofrecer más detalles ni asumir públicamente responsabilidad alguna.
Como ya ocurrió con Lèpoka, que también denunció la falta de contrato, en los comentarios de publicaciones anteriores, la organización ha llegado a reconocer errores, aunque sin hacerlo en ningún comunicado oficial, lo que sigue generando críticas por su falta de transparencia.
Con la salida de dos bandas importantes del cartel y las dudas en torno a la gestión del festival, la pregunta que queda en el aire es:
¿Quién será el próximo en bajarse del Liruprint Fest?
Seguiremos informando.
