CRÓNICA DE UNA NOCHE ELECTRIZANTE EN HELLDORADO: ARNAU & THE HONKY TONK LOSERS Y MOONSHINE WAGON

La mítica sala Helldorado arrancó el año con un concierto que quedó grabado en la memoria de los asistentes. Una velada de puro country, bluegrass y folk rock que reunió a dos potentes bandas: Arnau & The Honky Tonk Losers y Moonshine Wagon. La atmósfera de la sala estaba cargada de energía desde el principio, con un público ansioso por bailar y corear cada tema.

Arnau & The Honky Tonk Losers

La noche arrancó con Arnau & The Honky Tonk Losers, liderados por Arnau, quien con su guitarra y su potente voz dio paso a los demás miembros del grupo mientras abrían con “Road”. Desde el primer acorde, el público supo que esta noche sería inolvidable.

Con “Lonesome”, el segundo tema de la noche, el ambiente cobró un toque más íntimo y melódico. Las armonías a tres voces de Arnau, Íñigo y Leire (acompañada de su pandereta) dieron vida a un sonido country que hizo bailar a las primeras filas.

La magia continuó con “Homesick”, un tema que intensificó la conexión entre la banda y el público. Las palmas acompasadas y los pasos de baile fueron prueba de cómo la música puede unir a las personas.

Tras una breve presentación en la que anunciaron la grabación de su segundo disco, Arnau & The Honky Tonk Losers sorprendieron con “Hellrot”, un tema animado que levantó aún más los ánimos. Con “Forgotten”, el grupo exploró un sonido más rockero, donde la guitarra de Ibai y el bajo de Israel brillaron intensamente.

La noche avanzó con joyas como “Maron”, “Hell” y el clásico “Workin'”, donde los instrumentos de cuerda y la percusión jugaron un papel clave. Temas como “Pawnshop” y “Saddle Up” demostraron su versatilidad musical, mientras que “White Fr” cautivó con el protagonismo vocal de Leire.

Para cerrar su setlist, presentaron temas nuevos como “Fire” y sorprendieron con “Tree” tras una petición del público. Con “I’ve Always” y “Fallen”, Arnau & The Honky Tonk Losers dejaron una huella imborrable en la Helldorado, coronando su actuación con Leire mezclándose entre el público, pandereta en mano, para darle un cierre espectacular.

Moonshine Wagon: el furor del folk rock

Después de una pausa que solo aumentó la expectativa, Moonshine Wagon tomó el escenario para llevar la energía al siguiente nivel. Antes de comenzar, Kay entregó una pegatina de Brutal Folk Metal a Víctor para que la colocara en su contrabajo.

Con una sala abarrotada y un público entregado, comenzaron con “Everybody Lies”, un clásico que resonó con fuerza gracias a Dagda, Goiatz y Víctor.

Sin descanso, siguieron con “It’s So Slow”, donde Dagda demostró su habilidad cambiando entre banjo y bouzouki. “First World Problems” mantuvo la intensidad con un interludio instrumental liderado por el violín de Goiatz, que regresó al éxtasis con la participación de todos los integrantes.

La noche avanzó con “Mad, Unhappy & Stupid”, destacando el anuncio de que serán la primera banda acústica en actuar en el Resurrection Fest. Dagda fue presentado oficialmente como nuevo miembro, y temas como “Ghost” y “Slave of Distraction” reafirmaron su versatilidad y compromiso con el público.

“I Better Live Alone” arrancó sonrisas con su tono humorístico, mientras que “Wasted” desató una oleada de energía, acelerando el ritmo hasta llegar al clímax. Para “My Mind Is Mine”, invitaron a Iñi, el primer batería de Moonshine Wagon, creando un momento inolvidable.

La recta final fue un carrusel de emociones. Goiatz lideró con “Porca Misseria” y “Janari Azkarra”, mientras que “Marinelan Zai” emocionó al público con su melancólico mensaje con Lander como protagonista. Temas como “Txoria txori” y “I Want It That May” mantuvieron la sala vibrando de pasión.

El éxtasis llegó con el cover de “Ace of Spades” de Motörhead, donde Lander homenajeó a Lemmy con una energía arrolladora con su guitarra. Arnau & The Honky Tonk Losers se unieron al final para interpretar “My LIVER Is Trying to Survive” y un medley de “TNT” de AC/DC con “Empty Bottle”, cerrando una noche que quedó en la memoria de todos.

Conclusión

La noche en la Helldorado fue una celebración de música, energía y conexión. Arnau & The Honky Tonk Losers demostraron su talento emergente, mientras que Moonshine Wagon reafirmó por qué son una de las bandas más queridas del género. Entre aplausos, bailes y una pasión desbordante, ambas bandas dejaron claro que el 2025 será un gran año para la música en vivo.