Cada 21 de Junio tiene cabida una fecha muy especial, ya que además de ser el día más largo del año en el hemisferio norte, es el 𝐢𝐧𝐢𝐜𝐢𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝐒𝐨𝐥𝐬𝐭𝐢𝐜𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐕𝐞𝐫𝐚𝐧𝐨 𝐨 𝐋𝐢𝐭𝐡𝐚, como se le llamaba antiguamente, y como con toda fiesta de origen pagano, Litha fue adoptada por el cristianismo, su nombre fue cambiado, y muchas de sus tradiciones fueron eliminadas.
Este fenómeno natural fue tan importante para muchas culturas como la celta y para los druidas, que crearon los famosos “círculos de piedras”, como Stonehenge en Gran Bretaña y Newgrange en Irlanda, que están perfectamente alineados con la salida del sol en los solsticios de verano y de invierno.
𝐀𝐥𝐛𝐚𝐧 𝐇𝐞𝐫𝐮𝐢𝐧, una noche para dedicar a la mística comunión que forma el sol con la tierra, una noche que protagoniza el fuego purificador, en el que arde todo aquello que ya no nos acompañará.
Durante Litha, los velos entre los mundos eran delgados, los portales entre los campos que conocemos y los mundos del más allá se abrían, por lo que era un momento excelente para los ritos de adivinación. Esto es común a la celebración de Samhain.
Era común que las parejas de novios se dieron la mano y saltaran por encima de las brasas del fuego tres veces para asegurarse un matrimonio largo y feliz, incluida la prosperidad económica y muchos hijos.
Se pensaba que las brasas de la hoguera de la celebración de Litha, ya carbonizadas, poseían poderes protectores, pues eran amuletos contra lesiones y malas cosechas y eran comúnmente colocadas alrededor de los campos de cereales y huertos para proteger los cultivos y garantizar una abundante cosecha.
Cuando el reloj marque la medianoche, es el momento de recoger hierbas, pues estas noches transfieren su magia, verbena para que las jóvenes encuentren el amor, o muérdago para los druidas, cortado con hoces de oro sobre tela blanca. Y las hogueras dan luz y calor para alejar a los malos espíritus.
Incluso las antiguas civilizaciones construyeron monumentos donde ocurren eventos solamente en esta fecha. En la 𝐏𝐢𝐫𝐚́𝐦𝐢𝐝𝐞 𝐝𝐞 𝐂𝐡𝐢𝐜𝐡𝐞𝐧 𝐈𝐭𝐳𝐚́ dos lados de la estructura quedan en sombra mientras los otros dos se iluminan. Y así ocurre en diversos lugares alrededor del mundo, iluminaciones de pinturas rupestres y alineaciones con monumentos.
Una de las canciones dedicadas a esta celebración es ‘❜𝐋𝐨𝐬 𝐅𝐮𝐞𝐠𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐁𝐞𝐥𝐞𝐧𝐮𝐬❜’ , del disco Belos (2016) de Salduie donde nos cantan parte de los rituales efectuados en este gran día.